22 de octubre de 2010

... la BRONCA es inmensa y ¡¡a MARIANO LO VAMOS A VENGAR!!


Ayer, después de participar de la masiva marcha en repudio al asesinato del militante Mariano Ferreyra, asesinado ayer por la burocracia de la Unión Ferroviaria, tuve que escuchar un discurso totalmente despreciable y de un cinismo atroz. Por ahora sólo puedo responder a eso en este escrito, pero la BRONCA es inmensa y ¡¡a MARIANO LO VAMOS A VENGAR!!

Cristina Fernández decía ayer: “En realidad, el momento amargo que vivimos los argentinos ayer, es producto de lo que yo denomino "bandas", porque no se me ocurre ponerle otro nombre u otra palabra a gente que se conduce y que quiere arreglar las cosas a los golpes y a los tiros.” Bandas, ¡sí! Bandas de tus amigos, los burócratas sindicales a los cuales apoyás fervientemente y hasta fuiste vos la que inauguraste el local sindical de la UF.

“La verdad es que yo no quiero vivir más en una sociedad donde salgan a la calle con palos o con armas de fuego; no me gusta vivir en una Argentina donde se sale a manifestar con palos.” Claro, salgan a manifestar tranquilos que “no les vamos a hacer nada”. Palos “contra” armas de fuego, que combate tan igualitario (como el matrimonio que recordaste defender 7 años después de gobierno del kirchnerismo…). Gracias que al menos tenemos palos para defendernos de TU burocracia sindical, de TU policía federal. Porque decís que “no hubo un gobierno en la historia de la República Argentina que soportara cortes de ruta durante cuatro meses enteros, bloqueos de fábricas, desabastecimiento y que no hubiera un solo rasguñado en este bendito país.” Y decís estar muy orgullosa de esa política: “prefiero pagar mil costos políticos por no reprimir antes que tener que lamentar la muerte de un argentino.” Pero claro, cuando salen los terratenientes rurales que a fin de cuentas defienden los mismos intereses que vos, los de la burguesía, los tratás con mucho amor… Ahora, me parece que te estás olvidando algunas cosas: Las 4 represiones a l@s trabajador@s del Casino Flotante, la brutal represión a los obreros de Maffisa (20 obreros contra un helicóptero y el doble de efectivos policiales que pusiste para “buscar” a López), la represión en Kraft-Terrabusi ¡donde mandaste hasta la montada! Y decís que tu policía no lleva ni balas de goma… bien que l@s obrer@s de Kraft tienen cientos de impactos de balas de goma, y de última parece ser que no les hacen falta… ya aprendieron a matar a golpes como lo hicieron con Rubén Carballo y como cagaron a palos a Luciano Arruga y después lo desaparecieron.

¿Qué pasó Cris? ¿Ya te pegó el Alzheimer? … ¿No, no? Es ESA tu política. Nos hacemos los progres, pero si se organizan para dejar de ser explotados, para dejar de ser oprimidos…¡y no! Ahí ya es demasiado… sólo querés manifestaciones que apoyen la Ley de Medios. Y no te preocupes por aclarar, se entiende perfecta TU política de reconciliación con las genocidas FFAA, las necesitás para que el día de mañana, cada vez más cercano, en que salgamos a las calles a reclamar todos nuestros derechos postergados… ¡nos caguen a tiros!

Finalmente seguís insistiendo: “Por eso, este hecho amargo que vivimos ayer, este hecho triste como es la pérdida de una vida, es lo que me hace reafirmar el rumbo, la decisión política de no recurrir a la represión contra las manifestaciones sociales”… Yo diría: la decisión política de recurrir a la represión pero ¡tratando de que no se note mucho! Por eso hay bandas de burócratas que amedrentan y hasta matan a luchadores sin precisar mancharle aún más las manos de sangre a la Policía Federal…

¡Es más que simple! Si realmente querés que paguen los autores del hecho que “tan mal de pone” ¡No busques más! Estuvieron a tu lado en el acto en Racing y en miles de lugares más… ¡¡Es toda la burocracia sindical, tu amiga fiel!!

Como cantábamos ayer: “¡A MARIANO FERREYRA LO VAMOS A VENGAR CON PIQUETES Y LA HUELGA GENERAL!”

Fuente: http://www.casarosada.gov.ar/index.php?option=com_content&task=view&id=7751&Itemid=66

15 de agosto de 2010

¿Igualdad? ¿qué igualdad?


En: http://www.pts.org.ar/spip.php?article15728

En las agencias de trabajo, la situación se repite: miles de jóvenes trabajadoras son forzadas a ocultar a sus hijos en las entrevistas con el jefe de personal. Si ya están trabajando cuando quedan embarazadas, son despedidas. La mayoría trabaja en condiciones precarias, sin ningún resguardo legal ante el despido, ni mucho menos guardería o licencia por maternidad. Sin embargo, una de cada tres mujeres que trabaja es jefa de hogar. ¡Y más de la cuarta parte de las mujeres del país vive bajo la línea de pobreza! Esa es la realidad de millones de mujeres, porque sólo el 2,5% de las que trabajan son “patronas”; son muy pocas las cuentapropistas y la enorme mayoría –¡el 80%!- son asalariadas. Este ejército de mujeres trabajadoras es mayoría en la educación, la salud y el trabajo doméstico; representan casi la mitad de los trabajadores de Comercio, Hoteles y Restaurantes. También tienen una alta participación en la industria textil y en la alimentación; pero siempre son incluidas en sectores donde se necesita menor calificación técnica –aunque la mayoría de las trabajadoras terminó el secundario-, donde cobran salarios menores a los de sus compañeros varones. A la discriminación laboral, los salarios más bajos y los trabajos más precarios, hay que agregar que las mujeres corren el riesgo de ser víctimas del abuso de capataces y patrones. Y que, además, están sometidas a otra jornada de trabajo que nadie reconoce como tal y que se hace gratuitamente: la que se dedica a las tareas domésticas y al cuidado de la familia. No es algo menor, porque esa extenuante jornada es una de las razones que, en la práctica, impide que las mujeres tengan el mismo derecho que sus compañeros a dedicarse a la organización y la lucha por sus propios derechos.

Como si todo esto fuera poco, son las trabajadoras, las mujeres de las barriadas populares, las jóvenes con empleos precarios y desocupadas las que corren riesgos de salud y hasta el peligro de morir cuando, por las más diversas circunstancias, recurren a la interrupción voluntaria del embarazo.

No más muertes por abortos clandestinos

Todas las mujeres atravesamos la experiencia de un aborto o vivimos de cerca esa experiencia de nuestra madre, nuestra hija, una hermana, una amiga, una vecina, una compañera de trabajo o estudio. Porque, en Argentina, se practican 500 mil abortos cada año: la más elocuente demostración de que la penalización del aborto no impide que éste se realice y que las mujeres de todas las condiciones sociales recurran a la interrupción voluntaria del embarazo bajo las más diversas circunstancias. La penalización del aborto, evidentemente, no impide su práctica; lo único que consigue es que se realice en clandestinidad.

Y si bien todas las mujeres atravesamos o vivimos de cerca la experiencia del aborto, las condiciones impuestas bajo la clandestinidad no son para todas iguales. Para una minoría, están disponibles las clínicas truchas –con atención médica, anestesistas, monitoreo cardíaco, enfermeras e higiene-, donde el pago de más de mil dólares garantiza una intervención quirúrgica aséptica, rápida, sin complicaciones. Se calcula que el negocio reditúa mil millones de pesos al año, una cifra que no sólo permite cubrir los costos y los honorarios profesionales, sino que también paga la impunidad, mediante coimas a la policía, los funcionarios municipales, abogados, etc.

Mientras tanto, una gran mayoría de las mujeres no encuentran otra salida que recurrir a parteras y enfermeras que atienden en su propia casa, a métodos caseros de improbable eficacia, a farmacéuticos y curanderos, a consejos que circulan a media voz, a otras medidas drásticas sugeridas por la propia desesperación… ¿Para qué entrar en detalles por todas sabidos? Se calcula que son aproximadamente 400 las mujeres que mueren por esta razón, cada año, con perforaciones uterinas, hemorragias incontrolables y cuadros de infecciones generalizadas. Las que corren ese riesgo son las adolescentes y jóvenes de las barriadas populares, las mujeres que tienen trabajos precarios, aquellas que están desocupadas sosteniendo a su familia con subsidios mínimos, las que son sostén de hogar con salarios que ni siquiera cubren la canasta familiar…

Penalizando el aborto no se puede evitar que éste ocurra. En cambio, si fuera legal, se podrían evitar tantas muertes producidas por las consecuencias del aborto clandestino. Por eso, junto con la exigencia de educación sexual y el acceso gratuito a la anticoncepción, la lucha por el derecho al aborto –para que sea legal, seguro y se practique gratuitamente en los hospitales públicos- forma parte de la lucha por los derechos de las mujeres trabajadoras y el pueblo pobre.

Organicemos comités de apoyo a la ley por el derecho al aborto, que junten firmas para exigir que sea aprobada en el Congreso, que impulsen una gran campaña activa con afiches, pintadas, buscando la adhesión de sindicatos, comisiones internas, delegados y delegadas, para que seamos miles quienes nos movilicemos para conquistar este derecho.

4 de agosto de 2009

"La independencia del arte, para la revolución;
la revolución para la liberación definitiva del arte"


Manifiesto por un arte revolucionario independiente, León Trotsky, André Breton y Diego Rivera.

23 de enero de 2009

"Pero seguimos caminando, nos agachamos y pasamos un vado, nadamos ahogándonos en el fango, trepamos arrastrándonos por malignos paredones lisos. Lloramos y nos desanimamos, gemimos atemorizados y aullamos con llanto doloroso. Pero seguimos adelante, caminamos y padecemos, caminamos y nos abrimos paso a mordiscos."

"Ellas sí que estaban a la altura debida, no al nivel del piso, pero tampoco tan endemoniadamente arriba y lejanas como yo; no entre la gente y tampoco tan aisladas. Además, eran muchas. Supe entonces que ellas representaban una felicidad que yo no había alcanzado aún."

Una sucesión de sueños, Hermann Hesse.

31 de diciembre de 2008

No puedo explicarme,
las palabras se estancan en mi garganta,
sin intención de salir.
Es que estas desprotegidas,
no quieren ser ignoradas, ni golpeadas,
ni mucho menos malentendidas.
Pero siempre lo serán...
porque mueren en mi pecho,
ahogadas... pero jamás olvidadas...
Querrán salir desesperadas
cuando ya sea demasiado tarde.
Cuando hayan sido ya muy malentendidas
y no puedan volver al momento exacto
donde debían escapar de mí,
por más que nadie quisiera oírlas, salvo yo,
que las conosco de memoria
pero jamás las oí fuera de mi mente.
Ellas buscaron y buscaron el momento para salir,
para explicar, para solucionar flashes seguramente...
pero no lo encontraron...
No querías escucharlas...
Ahora flasheá! es la única que queda...

...el problema será cuando tenga cosas más importantes que decir...

22 de octubre de 2008


"Y si amor es enfermedad humana e ignorancia del alma, eso no se debe censurar como una falta sino considerarse como una desdicha."

(Gorgias de Leontino, Encomio de Helena,
12. 82B11 19)

19 de octubre de 2008



«Y éste deberá ser el aspecto del ángel de la historia. Ha vuelto el rostro hacia el pasado. Donde a nosotros se nos manifiesta una cadena de datos, él ve una catástrofe única que amontona incansablemente ruina sobre ruina, arrojándolas a sus pies. Bien quisiera él detenerse, despertar a los muertos y recomponer lo despedazado. Pero desde el paraíso sopla un huracán que se ha enredado en sus alas y que es tan fuerte que el ángel ya no puede cerrarlas. Este huracán le empuja irreteniblemente hacia el futuro, al cual da la espalda, mientras que los montones de ruinas crecen ante él hasta el cielo. Ese huracán es lo que nosotros llamamos progreso.»

«Tampoco los muertos estarán seguros ante el enemigo cuando éste venza. Y este enemigo no ha cesado de vencer.»

(Benjamin, Illuminations, pp. 257, 259-60)